A los 430 animales que permanecen en el refugio de Villa Lorena, que ha estado entre los reconocimientos y las polémicas, ya no los ronda el riesgo del invierno.
Pero la suerte de esos animales está entre su traslado o su sacrificio. El Dagma ha elevado reparos al lugar y el 9 de diciembre de 2013 ordenó su cierre por condiciones inadecuadas.
"Uno de los escollos está en que no hay sitio para animales maltratados".
La Fundación Para la Defensa, Vida y Amor de los Animales Fundapaz - Villa Lorena, que creó ese refugio en el barrio Floralia, se opone a esas medidas. Sus directivas dicen que son animales rescatados del maltrato humano y el tráfico ilegal.
“Somos el primer refugio de este tipo en Latinoamérica y el segundo en el mundo. Comenzamos recibiendo animales lastimados por el narcotráfico, de circos y de casas, hasta el mismo Dagma nos traía especies y no recibíamos nada a cambio, ahora nos quieren acabar", cuenta María Eugenia Gutierrez, la administradora.
Son 25.000 metros cuadrados donde habitan mandriles, felinos, reptiles, entre otros.
“Hemos atendido casos tristes como el de Mister, un tigre de bengala de un circo que le arrancaron los dientes y las garras porque asustó a un niño. O a Bernarda, mono araña que recibió un disparo porque se estaba comiendo unos mangos; esos animales fueron desechados, aquí les dimos amor”, cuenta.
Aunque llegaron a tener 850 animales, el Dagma incautó más de 200 en el 2013 y ordenó no recibir más. “Nuestro trabajo no es reconocido por el Gobierno (…), vivimos de donaciones de empresas y vecinos, pero la mayoría sale del bolsillo propio para pagar cuidadores y técnicos especializados", dice Gutiérrez.
En la temporada invernal el desbordamiento del río Cauca dejó bajo el agua no pocas jaulas. “No sufrimos pérdidas y garantizamos la vida de los animales".
Si el sitio es problema pedimos una reubicación, pero que no lo cierren", indica la administradora.
‘El refugio está en proceso de revisión’: Dagma
Andrés Posada, líder del grupo de gestión de fauna y flora silvestre del Dagma, indicó que el refugio se encuentra en un proceso de revisión jurídica y que tan pronto salga la resolución se definirá el futuro de Villa Lorena. A su vez, indicó que en el decomiso realizado en el 2013 los animales fueron reubicados. “Los animales no están bien, algunos necesitan atención y serán llevados a hogar de paso del Dagma en el Bosque Municipal, la eutanasia está contemplada en la norma, pero como entidad evitaremos aplicarla”, dijo.