Todo el mundo le gusta adquirir animal de compañía: ¡de todas las razas, colores y tamaños!
Hoy vamos a conocer la historia de un viejo perro que fue dejado en el veterinario para ser eutanasiado. Este perro, llamado Emu, tuvo una vida muy dura. Fue dejado en el veterinario para ser eutanasiado, pero, afortunadamente, el veterinario sabía que ese perro todavía tenía muchos años de vida por delante.
En vez de quitarle la vida a Emu, el veterinario preguntó si podía ir al “día de la adopción”, organizado por Special Sidewalk. A partir de ahí, Emu encontró una familia adoptiva, para darle mucho amor y cariño. Ya viviendo con su familia de acogida, fue llevado a un centro veterinario, para iniciar su proceso de tratamiento.
Emu estaba muy nervioso al principio, pero cuando percibió que esas personas estaban allí para ayudarle, empezó a salir de su “concha”. A pesar de todo lo que pasó, era un perro muy dulce y simpático.
A él le encanta llamar la atención y sólo quería amar y ser amado. Pero, adoptar un perro más viejo no es fácil, y mucho menos uno que ya no está en su mejor forma como Emu. Pero su nueva familia se negó a renunciar.
Finalmente, llegó el “día de la adopción”. Su nueva familia adoptiva estuvo allí durante todo el día, dando todo el amor y cariño que él necesitaba para sentirse seguro.
Dos meses después, ya se había instalado en su nueva casa y hasta tuvo un nuevo nombre: ¡Nutzie!, y tiene un nuevo hermano, llamado Sahara, y los dos son completamente inseparables.
Emu ahora es un perro feliz y sano, con una familia amorosa que siempre cuidará mejor de él.
¡Él tuvo una segunda oportunidad en la vida gracias a un veterinario que creyó en él!
Todos los animales como Emu merecen una segunda oportunidad. ¡Adopta, no compres!
Vea su increíble transformación en el vídeo de abajo. ¡Es difícil creer que él es el mismo perro! Emu pasó de un perro de la calle a una buena mascota, que no para de sacudir su cola, ni de sonreír:
